Milagros y Graeme

Tradiciones escocesas: Gaitas, kilts y whisky para el "Sí, acepto"

Las veces que tuvimos que reprogramar la boda por las restricciones de COVID parecen ser parte de otro mundo. Pero, entre esos cambios, llegó lo más hermoso: un bebé adorable que se convirtió en el invitado de honor 💖 Finalmente, todo se alineó y la magia ocurrió para Milagros y Graeme.

Las preparaciones se hicieron en el New Lanark Mill Hotel, un lugar con mucha historia, construido en el siglo XVIII. Su restauración conservó el exterior de piedra tradicional mientras que el interior se renovó con un toque moderno. Desde allí, y con lluvia (¡fuera, Satanás!), nos dirigimos a Folkerton Mill, el sitio para la ceremonia y recepción, un antiguo molino en un paisaje deslumbrante. Campos verdes, colinas, arroyos cristalinos y pueblos pintorescos marcaron nuestro recorrido.

La lluvia no cesó, así que la ceremonia, que estaba planificada al lado de la rueda del molino, se trasladó al interior, a una sala impregnada de tradición e historia. Luego vino el "Sí, acepto" y el compromiso se selló a la manera escocesa, brindando con un trago de whisky!

Luego, la fiesta se desató. Empezó con un gaitero escocés, que junto con el novio y sus familiares en kilts, transportó a todos a un ambiente celta. La recepción incluyó bocadillos deliciosos (¡me confieso culpable de algunos de los que faltaban!), cena y mucho baile. Todo fue un éxito. La intensidad con la que terminó fue prueba irrefutable, jajaja.

Milagros, Graeme, les deseo lo mejor en esta nueva etapa para los tres!
Y, por cierto: la CHOCOTORTA DE CASAMIENTO fue un gran detalle!!!



No se pierdan estos proveedores excepcionales!

Preparativos: New Lanark Mill Hotel.

Civil y recepción: The Folkerton Mill.